Por si no os había hablado de él, Luigi Al-Dente es el cocinero del submarino.
Sus platos son para chuparse los dedos, aunque la verdad es que Liugi no es un tipo muy listo, para qué engañarnos. Después de comer solemos hablar nosotros dos solos. Le gusta mucho la música y eso hace que me sienta menos sólo en esta misión, pero mantener una conversación con él es complicado... le cuesta pillar muchas cosas, y siempre está repitiendo su famosa frase: ¡Más despacio, cara-carpaccio!
Como véis es un chico con un aspecto muy sano, aunque siempre está lleno de lamparones en la ropa (pesto, aceite, tomate, mozzarella...).
El viejo de Liugi... jeje.
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